Normalmente cuando pensamos en un spa pensamos en sitios super-fashion rodeados de un ambiente especial, muchas veces cargados de glamour y en lugares especiales. Pero poco a poco, debido a la moda de los spas y los masajes, los llamados «spas urbanos» han ido apareciendo, y aunque conservan el encanto, los hacen accesibles a todos. Y esto es lo que ocurre con el spa del que voy a hablaros hoy; nadie se imaginaría ni por un momento encontrar un precioso spa en medio de un polígono industrial.
Eso es lo que ocurre en el polígono de «La ciudad del Transporte» de Zaragoza, en la carretera a Huesca, donde se encuentra el Hotel Real, un hotel de cuatro estrellas del grupo Eizasa Hoteles, que dispone de un spa más que decente.
El Hotel Real dispone de un servicio de gimnasio y spa para sus residentes por el módico precio de 6 euros al día, pero este servico no se les debe llenar con las personas alojadas y el hotel ofrece este servicio a «externos» sin necesidad de disfrutar de más servicios del hotel.
Y eso es lo que me pasó, que gracias a un cupón de Groupalia pude disfrutar de una tarde de spa y mojito.
El spa está dotado de tres saunas: sauna húmeda, sauna seca o finlandesa y baño turco; duchas, chorros de agua, jacuzzis y sillones térmicos para acabar la sesión de spa.
El circuito está planteado para hacerlo aproximadamente en una hora, tiempo más que suficiente para poder disfrutar de él si no pensamos repetir en las saunas.
Sin aglomeraciones de gente -imagino que debido a su ubicación-, este «coqueto» spa no te dejara frío, aunque si lo hará su «cubo»… En definitiva, un lugar donde poder pasar un rato tranquilo y muy agradable.
Y después del SPA podéis subir a la terraza-lounge club “La Sabina Chill”, una terracita chill out situada en la última planta del hotel donde podréis disfrutar de un fantástico mojito en un ambiente tranquilo para terminar de relajaros.
Un sitio pues muy, pero que muy recomendable, donde perderse y alejarse de todo, en el que evadirte sin necesidad de ir muy lejos, y poder disfrutar de un rato de relax que tanto necesitamos todos.
El blog de Isaac Bolea 